La Organización de Naciones Unidas (ONU) estima que hay alrededor de 21 millones de refugiados y personas desplazadas alrededor del globo terrestre. 1 Claro está que esta cifra no incluye los millares que inmigran de zonas rurales a las ciudades del mundo, ni las que voluntariamente inmigran de una región a otra o de una nación a otra buscando mejores condiciones de vida. Sumando dichas categorías, se estima que habrá por lo menos 50 millones de personas que han salido de un lugar para inmigrar a otro. Cabe observar, entonces, que en este nuevo siglo hay un movimiento humano alrededor del globo más grande que jamás se haya visto en la historia humana. Y Dios está llamando a la iglesia – y presentándole una oportunidad maravillosa – a unirse en solidaridad con inmigrantes, extranjeros, advenedizos, forasteros, y allegados de todas las naciones que rodean la iglesia de Jesucristo en todas…
Publicación de reflexión teológica y pastoral del Seminario Nazareno de las Américas